La antigua sede de la Caja Económica en Río de Janeiro ha pasado por una transformación visual, incorporando soluciones arquitectónicas de punta.
La antigua sede de la Caja Económica, ubicada en el centro de Río de Janeiro, un edificio icónico que durante décadas ha representado un hito arquitectónico en la ciudad, recientemente ha experimentado una transformación significativa, aportando modernidad e innovación a su apariencia. El proyecto de reforma fue cuidadosamente planificado para mejorar la estética y la eficiencia energética del edificio, destacando la instalación de una fachada ventilada con revestimiento de porcelanato.

Este sistema de fachada ventilada utiliza porcelanato como revestimiento cerámico, que se fija sobre una estructura de soporte, creando una cámara de aire entre el revestimiento y la pared estructural. Esta cámara actúa como un aislante térmico, reduciendo la transferencia de calor y frío y, así, mejorando la eficiencia energética y el confort térmico del edificio.


Además de sus ventajas térmicas, la fachada ventilada de porcelanato proporciona un acabado estético moderno y duradero, que se integra armoniosamente al contexto urbano contemporáneo, respetando la importancia histórica del edificio. El porcelanato es conocido por su resistencia y baja mantenimiento, lo que contribuye a la longevidad y preservación de la fachada.
Esta renovación reposiciona el edificio histórico en el escenario urbano, equilibrando la preservación de sus características arquitectónicas originales con la incorporación de soluciones modernas que cumplen con las exigencias contemporáneas de sostenibilidad y eficiencia. El resultado es un edificio que honra su legado mientras abraza las necesidades tecnológicas y ambientales del presente.